No se escucha mi
nombre….
Ni entre tus
pensamientos nocturnos,
tus botellas
destapadas
o en la
melancolía del domingo.
Un silencio de
panteón acorrala nuestra historia
en el anonimato
de la evasión,
en la palabra no
escrita.
en el autocontrol
del dejo…
Un ejemplo a
seguir.
Tal vez se amó al
amor
más que al objeto
que lo viste.
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