Vistas de página en total

domingo, 26 de julio de 2015

Más o menos así va la cosa.

Me provocó escribirte...
Regalarte palabras
a cambio de momentos.
Recordarte todas las cosas
que te digo al oído antes de dormir.

Me dio la gana de recordarte...
De confirmarte lo feliz que me haces
y las ganas irreductibles
de seguir a tú lado siendo nosotros.

Amanecer contigo
fue la confirmación
que dormir enlazados
no es un mito.
Que despertar con besos
era sentirse en domingos eternos.
Que saberte para mi
a pesar de la tribulación
es tú forma de decirme
"Bienvenida".

El exceso de pizza y las cervezas,
la vista bonita y las risas cómplices.
Los dulces compartidos,
vernos físicamente repletos de amor.
No tiene precio...
Le sobra valor.
Los besos sin prisa,
las llamadas con bonitos silencios
tus ojos cuando me miras
la posibilidad de vernos
de adentro hacia afuera.
Dónde habías estado?
Por qué no llegué antes?

Gracias que no debo dar
pero no puedo evitar sentir.
No me juzgas, no me atacas.
Me entiendes, me quieres imperfecta.
Con mis caderas anchas,
con mi inseguridad y cansancios.
Con mis colorea regados en la cama,
con mis antojos de media noche.

Te recibo,
te acepto,
te celebro.
Desde las promesas
que no hacemos,
desde el presente
que aquí sobra.
Desde la vida que me llenas...
De antes como la canción.

No hay comentarios:

Publicar un comentario