Vistas de página en total

sábado, 14 de junio de 2014

Humanidad...

Creo entender que la vida y el mundo se resumen en una constante búsqueda. Quizás la tribulación no radique en el deseo constante de conseguir, en lo personal, creo -porque en algo hay que creer- que el nudo crítico radica en el objeto anhelado, más que en las herramientas que entrelazamos para llegar a él. Por ejemplo, tal vez, nosostros somos -cuando nos permitimos ser- un conjunto cóncavo y convexo. Que en ocasiones se quiere y en otras se odia, que en una ocasión se amaron pero también se desmembraron, que en una casualidad repetida se siguen viendo y reconociendo sin buscarlo, aunque también, se cubren los ojos para jugar a olvidarse con pañitos negros de soledad que huelen a guardado y a sal. Somos una ecuación de esas que dura mucho tiempo anotada en una pizarra y luego al tratar de borrar siempre deja una huella aritmética. Aunque luego recuerdo otras tantas cosas más y me parece injusto inmortalizarte en mis letras porque es un crédito muy grande así todavía no sea famosa, porque cuando escriben de ti te haces eterno y yo creo haber muerto en páginas viejas. Pero así como tantas otras cosas mi optimismo me hace poner los pies en la alfombra de ese portal que me conozco de memoria... Debo ser bastante aburrida para los que me miran preguntándose por cuánto tiempo más contaré la misma historia. Pero el entretenimiento no es mi fuerte, yo que vivo leyendo y esperando la lluvia sólo sé moverme en tonos cálidos y a veces grises, por ratos de neón... No creo deberle a nadie un argumento digno. Siempre soy los extremos de todo sacado de la nada, y si lo hago debo hacerlo en grande -si se trata de errores hasta papelillos incluyo- el caso, es que... Yo iba a escribir que quizás hay algo más en lo que parece ser siempre menos. Pero me desvié y terminé pensandote, eres un jodido suertudo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario