Vistas de página en total

sábado, 11 de abril de 2015

El curioso pretende...

Una pequeña filigrana
de electricidad
baja impávida
en microsegundos vitales.
Mi cuerpo reconoce su cuerpo
entre extraños
que creen conocernos...
Las cuatro paredes
parecen de vidrio
cuando nos buscamos
esquivos los besos,
el roce foráneo y
la dopamina del secreto
nos llenan de aire,
flotamos...
Sin separarnos del suelo.
Las bocas se extrañan,
las manos no mienten...
Los sentidos conspiran
y la cita pendiente
son festín de curiosos.
Baja
.
.
.
Baja
.
.
.
Y sigue bajando
a mis vírgenes tobillos
hasta ahora ignorados...
Su mirada me descubre,
sus ojos profundo argumento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario