Nosotros humanos de turno, emprendemos a lo largo de nuestra vida una búsqueda infinita por el equilibrio como sinónimo de paz. Algunos con métodos más ortodoxos que otros pero de igual manera predestinados a transitar un camino desconocido pero necesario.Yo siempre escogí a la palabra, bajo cualquier disfraz, bajo cualquier luz. Este espacio brinda una pequeña ventana a mi mundo...
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domingo, 26 de febrero de 2012
sábado, 25 de febrero de 2012
Amor y Sexo...
El amor y el sexo
solo tienen de similitud
las cuatro letras
que lo conforman…
El amor es una
energía perenne
que escapa de
cualquier ecuación.
Es el eslabón más
alto en la búsqueda eterna
de justificar tu
existencia mientras recreas
la órbita
perfecta del que sabe volar.
El sexo es un
intercambio sin agradecimiento.
Estás
desempeñando un rol de préstamo
que solo
practicas en escenarios independientes.
Con suerte
recibirás un par de aplausos
y una llamada al
día siguiente de consolación.
El amor es la
risa entrelazada con el silencio
que solo se
siente entre gemidos y miradas
que no se
apaciguan en el deseo constante
de hacerse uno
con la luna y extraviarse con el sol…
El amor es la
excusa perfecta para no
levantarse un
domingo de la cama.
El sexo es el
protocolo constante de jugar
a estar
disponible con la mente pero sentirte
ausente con el
alma…
Es la danza
dispareja de soñar que en un futuro
no cabalgas con
un itinerante sino, por el contrario,
navegas con la
otra mitad que te ofrecieron llegaría.
El amor es poesía
combinada con vino blanco…
Es confiar que
todo puede mejorar con aferrarse
a sus caderas y
besar sus tatuajes llenos de historia.
Es la garantía de
que a poca luz aún tus huellas
siguen conociendo
el camino de llegada.
El sexo es el
único recurso que queda
para jugar con el
tiempo que avanza a la inversa.
Es el nudo que
interrumpe la textura lisa
de la cuerda que
lanzo, con la esperanza de que tu añoranza
y recuerdo de mi
jueguen a seguirla como un gato a la luz…
Prefiero vivir en
las cuatro letras del amor
y no en las
cuatro paredes del sexo.
Carta sin firma...
No sé en donde
descansa el manual de lo correcto.
¿A dónde ir
cuando todo se hace polvo
tras la brisa
destructora de la realidad?
Mi amor no fue
suficiente para los dos
como tantas veces
te repetí en susurros…
El tuyo fue el
motor valiente que impulsó
un fuerte sentir
que poco a poco gastaste
con argumentos de
aquel guión nefasto.
¿Con qué cara se
mira al mundo después
de que te llevas
entre tus pies parte de mi alma?
¿En qué buzón
deposito mis dolores si ya
tus oídos están
sordos ante mi petición muda que te quedes?
Eras mi brújula
sensorial, todo tenía sentido
cuando empezaba
en ti…
Ahora solo me
queda el recuerdo de tus caricias,
caricias
compasivas mojadas por mis lágrimas.
No sé a donde ir
sin que tu recuerdo me persiga…
Decir que duele
queda bastante corto y mezquino.
Esta llama que
arde sin piedad en las entrañas
consume cada
espacio como la sal en una herida profunda.
Decir que soy
fuerte es solo una capa de autoprotección
que llega a
destiempo, pues ya estoy aquí, vulnerable,
húmeda y
expectante ante tus ojos que ya no miran.
Querer alargar el
tiempo, tus caricias,
tus susurros en
mi oído es un castigo físico…
Moribundas
golondrinas despedazan sus alas de cristal
donde reposaban
la ilusión que ahora parece de vidrio.
Duele tanto que
casi siento que pago de otras vidas
un karma que no
recuerdo haber cometido pero, si es necesario,
puedo pedir
disculpas por ello si eso minimiza esta lluvia constante.
Eres juez y
verdugo de una eternidad que nos duró poco…
Sedante natural...
En el bolso hecho
con la piel de mi alma
lanza tus piedras
más oscuras y pesadas.
Mientras, para
aliviar tu camino,
sembraré
esperanza de sorgo en el terreno del tiempo
que inclemente
erosiona las capas de la memoria en orden aleatorio.
En busca de
alejarte del frío y solitario invierno
bordé una cobija
de deseos
como Penélope lo
hizo por Odiseo
en espera de su larga
llegada…
Porque de
ilusiones también se vive
y por los sueños
el alma del valiente
muere para
renacer de las cenizas.
Porque de
ilusiones también se vive
aunque solo una
de las mitades respire…
Una casa que no requiere serlo...
Un espacio de
cuatro esquinas,
ecuación de
cemento gris
que cobra total
sentido
mientras ambos
seamos
el vértice que la
equilibra.
Tiempo efímero
pero retroactivo
de una historia
que nos debe páginas.
En búsqueda de
mantenerme a tu lado
sigo tu dualidad
que avanza
a pasos
extemporáneos.
Tu sombra no es
de este mundo
como tampoco lo
es
lo que llenan mis
poros…
Si solo pudiera
con el hilo de la paz
bordar tus
memorias esparcidas
lo haría sin
dudarlo como la premisa
de una vida que
nos junta y nos separa.
Si con la
seguridad ciega de este nosotros
que por momentos
no nos pertenece
pudiese aliviar
tus dudas
yo, vigilante,
caminaría
sobre el terreno
minado del pasado
para devolverte
los renglones torcidos
de tu historia
desconocida.
Ojala mi agua
calme tu sed…
Ojala la
eternidad nos dure un poco más.
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